3.1
¿TIENEN SIGNIFICADO LOS DÍAS SANTOS DE DIOS?
Cuando la gente
está muy contenta por algo, lo celebra. Cuando estas celebraciones tienen que
ver con acontecimientos pasados, a menudo nos referimos a ellas como
aniversarios. Las celebraciones de grupos étnicos o naciones enteras pueden
incluso convertirse en días festivos.
¿Se imagina una
vida sin celebraciones ni días festivos? Parece como si tuviéramos una
necesidad innata de celebraciones.
Los cumpleaños,
aniversarios y días festivos en el entorno familiar o en grupos étnicos o de países
ayudan a establecer una conexión entre el pasado y el presente. Celebrar juntos
une a todos los implicados, al menos temporalmente, en una forma común de
pensar y actuar. Esto crea relaciones entre las personas que participan en la
fiesta y las vincula a los acontecimientos que están celebrando. Por lo
general, la gente sabe por qué lo celebra, sobre todo si se trata de una
ocasión personal o familiar.
Las fiestas
nacionales suelen conmemorar acontecimientos históricos que a los legisladores
que las establecieron les parecieron de gran importancia. Podría decirse que un
indicador de la fuerza interior de una nación es la seriedad con que sus
ciudadanos consideran sus fiestas nacionales.
Parece ser una
tendencia en muchas de nuestras naciones occidentales avanzadas que incluso la
mayoría de las fiestas religiosas sean consideradas hoy en día por la mayoría
como nada más que tiempo libre adicional del horario de trabajo.
¿No deberíamos
conocer el significado de las fiestas que celebramos? ¿Y qué pasa si los
orígenes de tales festividades no son agradables a Dios?
¿Cuáles son los
orígenes de las fiestas religiosas más celebradas, como la Navidad y la Semana
Santa? Véase
el estudio ampliado más abajo.
Como se explica en
varios artículos de nuestro estudio ampliado (más abajo), las raíces de estas
fiestas se remontan al paganismo y, por tanto, ni siquiera son de naturaleza
cristiana. Esto se admite cada año en los periódicos. Sin embargo, algunos
dirían: "¿Y qué? ¡Es una fiesta maravillosa! ¿Puede estar mal celebrar el
nacimiento de Cristo?". Y después de todo, ¿no son las fiestas del Antiguo
Testamento anticuadas y obsoletas?
Es triste decirlo,
pero el precioso conocimiento sobre los festivales de Dios se ha perdido en el
mundo del cristianismo tradicional. La Biblia muestra que Jesucristo, los
apóstoles y la Iglesia primitiva celebraban las fiestas de Dios con gran
alegría. ¿Podemos equivocarnos si seguimos su ejemplo?
¿POR QUÉ
CELEBRAR LAS FIESTAS DE DIOS?
Las celebraciones
personales y nacionales pueden desempeñar un papel importante en la creación de
una conexión entre el pasado y el presente.
Los días santos
que Dios nos da no sólo establecen una conexión entre el pasado y el presente,
sino que también proporcionan una visión concreta del futuro.
Necesitamos una
visión de la vida, una visión que vaya más allá de nuestra simple vida física y
de nosotros mismos; de lo contrario, sucumbimos al poder destructivo del
egoísmo.
Vivimos en un mundo
egocéntrico. Para un número cada vez mayor de personas, la principal
preocupación parece ser: "¿Qué conseguiré con esto, y qué conseguiré con
esto en este momento?". Pero sin una enseñanza inspirada, "el pueblo
perece", o ""abandona la prudencia", como dice el libro de
los Proverbios (Proverbios 29:18). Nos reducimos al aquí y ahora.
El mensaje de
los días santos de Dios nos lleva a una visión positiva del mundo, una visión
en la que el pasado, el presente y el futuro se consideran todos juntos, lo
cual resulta en una perspectiva más clara de la vida.
¿QUÉ REVELAN LOS
DÍAS SANTOS DE DIOS?
¿Se puede decir que
se conoce realmente a alguien si no se conocen sus intenciones y sus planes?
Las personas que
se aman comparten sus planes e intenciones.
Dios, nuestro
Padre amoroso, comparte con nosotros su plan para la humanidad a través de sus
días santos.
¿Puede imaginar a
un padre amoroso que no compartiera con sus hijos los planes que tiene para
ellos? ¿No revelaría también un Dios bondadoso a sus hijos su plan y propósito
para la propia existencia de éstos?
Dios va mucho más
allá de la vida de cada uno para incluir a toda la humanidad en un plan de
salvación en el que nadie queda fuera. Todas las razas, todas las
nacionalidades y todos los grupos étnicos están incluidos en este plan maestro.
El plan de salvación de Dios para nosotros personalmente, así como para toda la
humanidad, se explica paso a paso a través de los días santos.
Si no conocemos
este plan y no vivimos según el mismo, ¿cómo podemos conocer realmente a Dios?
(1 Juan 2:3-5). Mucho de lo que parece injusto e inequitativo en esta vida se
aclara cuando comenzamos a comprender el panorama general del plan de Dios
explicado a través de estos días.
Por eso, para
muchos, el propósito de la humanidad es tan poco claro e impersonal.
La religión, y
especialmente la salvación, a veces parece ser un asunto muy impreciso. No es
fácil lograr una presentación sencilla de un asunto tan complejo.
Con un toque de
genialidad del que sólo Él es capaz, Dios ha presentado el mensaje de su gran
plan para la humanidad de una manera sencilla, significativa y comprensible,
todo ello integrado en el mensaje de los días santos.
A través de la
repetición anual de estos festivales, somos capaces de asimilar y grabar en
nuestras mentes este plan que todo lo abarca. Las fiestas paganas, en cambio,
nublan la mente; se concentran sólo en los sentimientos y en satisfacer los
sentidos físicos.
Los días santos
de Dios nos aclaran todo. Revelan el propósito de la vida y, por tanto, aportan
luz a nuestras vidas.
Las celebraciones
descritas en la palabra de Dios tienen lugar en tres períodos del año de la
tierra bíblica de Israel: durante la cosecha de principios de primavera,
durante la cosecha de finales de primavera y durante la cosecha de otoño. Dios
utiliza la analogía de los tiempos de cosecha para representar la
"cosecha" espiritual de la humanidad, que Él recogerá a través de
Jesucristo (Juan 4:35-38).
El resultado de
estas cosechas espirituales es la vida eterna en el reino de Dios (Juan
3:15-16; 6:40), que Jesucristo establecerá en la tierra a su regreso
(Apocalipsis 11:15).
Tal vez esto no le
parezca una revelación especialmente valiosa. Sin embargo, en el transcurso de
este programa de estudio, creemos que podrá llegar a comprender la maravilla
del plan de Dios para la humanidad.
Los días santos
de Dios representan el evangelio del reino de Dios, la buena nueva que
predicaron Jesucristo y los apóstoles (Lucas 4:43; Hechos 28:31).
Véase el estudio
ampliado más abajo: El Evangelio.
En inglés, la
palabra evangelio viene del inglés antiguo, gudspel y significa,
literalmente, "buenas noticias". Como anunció Jesús, el evangelio es
la noticia que Él trajo sobre el reino venidero de Dios y de cómo podemos ser
salvos y alcanzar la vida eterna en ese reino. Explica cómo podemos
reconciliarnos con nuestro Padre a través de la intervención de su hijo para
vivir para siempre en un nuevo mundo construido por Dios en esta tierra. ¡Esta
maravillosa y alentadora noticia es el mejor mensaje que la humanidad puede
recibir!
Al no comprender el
valor del plan de Dios para nosotros en la actualidad, algunos pueden decir:
"¿De qué me sirve un futuro glorioso si no puedo disfrutar nada de él en
esta vida?". Es un asunto de sabiduría poder llegar a comprender el propósito
de la vida ahora y en el futuro. La Biblia revela tal sabiduría.
Eclesiastés 2:13-14
dice: "Entonces vi que la sabiduría supera a la necedad como la luz a las
tinieblas. Los ojos del sabio están en su cabeza, pero el necio anda en
tinieblas".
La diferencia
entre conocer y no conocer el plan de Dios es como la diferencia entre tener
una vista panorámica maravillosamente clara desde la cima de una montaña en
oposición a andar dando tumbos en medio de una espesa niebla en el fondo del
valle.
En Levítico 23 Dios
describe sus siete fiestas. No son fiestas judías ni israelitas; Dios las llama
sus fiestas. Su fundamento es Dios mismo. Por eso Dios pone el día de reposo
semanal (sábado o Sabbath) al principio de la lista de días santos. El Sabbath
nos recuerda semanalmente al creador de todas las cosas, es decir, al autor de
este plan para toda la humanidad.
Debido a que es
ampliamente asumido y enseñado que estos días santos ya no se requerían en los
tiempos del Nuevo Testamento, nuestra próxima lección tratará precisamente
sobre esta cuestión.
PUNTOS
ESENCIALES DE ESTE MÓDULO
·
Celebrar
une a las personas a través de eventos.
·
Los
días santos de Dios explican la razón de la vida.
·
Los
días santos de Dios revelan su plan para la humanidad.
·
Los
días santos de Dios retratan el evangelio del reino de Dios.
ESTUDIO AMPLIADO
·
El
Evangelio
·
Una
crisis de identidad
·
Un
púlpito de ideas preconcebidas
·
Los
Evangelios para el siglo XXI, Parte 1: Los comienzos humildes
·
Jesucristo:
El mito y la realidad
·
¿Cuándo
llegará el verdadero Milenio?
·
De
la Pascua a la Semana Santa
·
Sueño
con una Navidad justa
·
Una
cascarón vacío
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