3.4
EL SABBATH: EL DÍA SANTO SEMANAL
En el módulo ¿Tienen
significado los días santos de Dios? vimos cómo estos días especiales revelan
el plan de Dios para la humanidad. Y en ¿Siguen siendo válidos los días santos
de Dios? se explica cómo Cristo, los apóstoles y la Iglesia de Dios del primer
siglo celebraban estos días, los cuales nos enseñan acerca de la liberación y
la salvación que ofrece Dios. Por último, Los días santos de Dios: Ayer, hoy y
mañana, muestra que, aunque el significado de los días santos se amplió en
tiempos del Antiguo Testamento, una nueva dimensión espiritual llegó en el
periodo del Nuevo Testamento. Estos tres módulos proporcionan una buena
información de fondo para el que ahora nos ocupa.
La observancia del Sabbath, o
sábado, como comúnmente se le llama en español refiriéndose al día de reposo, como
parte de los Diez Mandamientos se trata en el cuarto mandamiento: Acuérdate del
día de Sabbath. En este módulo nos ocuparemos de la conexión entre el Sabbath
semanal y los siete Sabbath anuales de Dios, así como de sus implicaciones.
¿Por qué Dios incluyó el
Sabbath semanal junto con sus siete fiestas anuales?
Puesto que la observancia de
los Sabbath anuales se requiere junto con el Sabbath semanal en el libro de
Levítico, esto implica que hay un significado adicional a la observancia del
séptimo día que va más allá de lo que leemos en los Diez Mandamientos.
DESCANSAR Y SANTIFICAR EL DÍA
En la primera referencia al
Sabbath en Génesis 2:2, la palabra hebrea sabat se usa para describir lo
que Dios hizo: "descansó". O podríamos decir, Dios "observó un
Sabbath". Esto sería más que simplemente descansar. La palabra hebrea nuah
significa "descansar, asentarse, estar en reposo, desistir del
esfuerzo", o "estarse quieto". Sabat significa:
detenerse, cesar, descansar. Cuando Dios "sabateó", cesó en su
obra de creación.
En el Sabbath aprendemos a
parar, cesar y descansar de nuestro trabajo normal y de la agitada actividad de
nuestra vida diaria. Por supuesto, podríamos guardar un día de descanso en el
sentido de "cesar de trabajar" cualquier día de la semana; no
necesariamente tendría que ser el séptimo día.
Pero en Éxodo 20:8-10
aprendemos sobre el Cuarto Mandamiento: "Acuérdate del día de reposo para
santificarlo. Seis días trabajarás y harás toda tu obra, pero el séptimo día es
Sabbath para el SEÑOR tu Dios. . . ." (el énfasis es nuestro).
No sólo debemos concentrarnos
en el aspecto del descanso, sino que también debemos santificar el Sabbath como
un día que debemos guardar para el Señor nuestro Dios.
Nadie puede santificar nada que
Dios no haya hecho santo con anticipación. Dios es santo (1 Pedro 1:15) y todo
lo que es suyo se convierte en santo. El Sabbath es el día santo de Dios,
porque Él lo bendijo y lo "santificó" o lo apartó para un uso santo
(Génesis 2:3), Él lo llenó con su presencia. En este sentido, entramos en
"tierra santa" cuando entramos en el tiempo reservado para el
Sabbath.
Si guardamos el Sabbath como
día santo, Dios y lo que Él nos manda hacer son el centro del día.
Con Dios en el centro del
Sabbath, éste se convierte en algo más que un día libre de trabajo. Se
convierte en un descanso reservado para que tengamos en cuenta a nuestro
Creador.
Ciertamente, podemos dejar de
trabajar; podemos descansar y santificar el Sabbath nosotros mismos en casa.
Pero la Biblia revela más cosas sobre el Sabbath que explican por qué el
Sabbath es también uno de los días santos anuales o festivales de Dios. ¿Qué
significa esto en la práctica?
UNA
SANTA CONVOCACIÓN
Leamos primero la forma en que está redactado
el mandamiento en Levítico 23:1-3, " El SEÑOR habló a Moisés diciendo: “Habla a
los hijos de Israel y diles que las fiestas solemnes del SEÑOR, mis fiestas
solemnes que proclamarán como asambleas sagradas, son estas: “Seis
días se trabajará, pero el séptimo día será Sabbath de reposo, y habrá una
asamblea sagrada. Ningún trabajo harán; es el Sabbath consagrado al SEÑOR,
dondequiera que habiten...'" (Versión
Reina Valera Actualizada).
La frase
"descanso solemne" es una traducción del hebreo sabat
sabaton-"un Sabbath de descanso completo". Es decir, un descanso
intensificado o realzado.
La Nueva
Versión Internacional dice "'Estas son mis fiestas señaladas, las fiestas
señaladas del SEÑOR, que ustedes deben proclamar como asambleas sagradas. Hay
seis días en los que pueden trabajar, pero el séptimo día es un Sabbath de
descanso, un día de asamblea sagrada. No hagáis ningún trabajo; dondequiera que
viváis, es Sabbath para el SEÑOR'".
Todas las
fiestas de Dios son asambleas sagradas o santas. En este sentido, se convierten
en convocaciones "solemnes" o santas.
La palabra
hebrea miqra, traducida como convocación, significa llamar a todos, es
decir, una reunión pública.
Los
días de fiesta siempre tienen que ver con la celebración, la comunidad y el
regocijo: celebrar juntos una ocasión especial.
Celebrar
juntos una causa común es algo que une más a las personas, que les da una
identidad especial.
La
celebración normalmente implica reunir a la gente para conmemorar un
acontecimiento. Al celebrar los días santos de Dios pensamos en cosas pasadas,
presentes y futuras. Véase el estudio ampliado más abajo: Los días sagrados de
Dios: Ayer, hoy y mañana.
El Sabbath
semanal nos recuerda a aquel que hizo todas las cosas, al Creador (Éxodo
20:11). También nos muestra que hemos sido liberados de una forma de esclavitud
(Deuteronomio 5:15), e ilustra un tiempo futuro de paz en el reino venidero de
Dios (Hebreos 4:9). Véase el estudio ampliado más abajo: El reino de Dios.
Estos son
motivos de celebración y alegría.
En el
Sabbath semanal, también debemos reunirnos para escuchar la enseñanza de la palabra
de Dios acerca de todos los aspectos de la vida y para disfrutar de la compañía
de otras personas que comparten nuestra misma forma de pensar.
Es
interesante observar que la palabra "iglesia" en el Nuevo Testamento
es ekklesia. Ek significa "fuera de" y klesis
"llamada". La forma verbal es ekkaleo, "llamar
fuera". Por lo tanto, la palabra "iglesia" significa los
"llamados fuera" o los "que han sido convocados".
Cumplir
plenamente con este mandamiento de la "santa convocación" significa
presentarse ante Dios y tener comunión en unidad durante este tiempo santo cada
semana.
En Hebreos
10:23-25 se nos instruye: " Retengamos firme la confesión de la
esperanza sin vacilación porque fiel es el que lo ha
prometido. Considerémonos los unos a los otros para estimularnos al amor y
a las buenas obras. No dejemos de congregarnos, como
algunos tienen por costumbre; más bien, exhortémonos, y con mayor razón cuando
vemos que el día se acerca." El Salmo 111 se refiere a la conmemoración
edificante y gozosa del Sabbath: "Alabaré al SEÑOR con todo mi corazón, en
la asamblea de los rectos y en la congregación" (versículo 1). Hablando
con entusiasmo de estas asambleas, el salmista nos anima a: "Servid al
SEÑOR con alegría, venid ante su presencia con cánticos. . . . Entrad por sus
puertas con acción de gracias, y por sus atrios con alabanza…". (Salmo
100:2, 4).
Un día de
fiesta no es un momento para detenerse en lo negativo; es un momento de
regocijo, recuperación, relajación y comunión positiva. Y la bendición de Dios
está en tales asambleas.
Cuando
el pueblo de Dios se reúne para rendirle culto, Él está presente en Espíritu de
una manera especial.
Mateo
18:20 nos dice que la asamblea puede incluso ser bastante pequeña: "Porque
donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de
ellos".
Reunirse y
comunicarse es importante para construir relaciones con los demás creyentes.
Celebrar el Sabbath como un día santo con otros fieles es una de las maneras
más importantes que Dios ha provisto para lograrlo. Fíjese en Malaquías 3:16,
"los que temían al SEÑOR hablaban entre sí, y el SEÑOR los escuchaba y
oía, y así se escribió delante de él un libro de memoria. . . ."
UN
ENFOQUE DIFERENTE
La
santidad del Sabbath y el hecho de que es uno de los días festivos de Dios
exige de nosotros un enfoque diferente con respecto al día, en las cosas que
hacemos y no hacemos, y en cómo nos presentamos ante Él.
En tiempos
de Jesús, los que no entendían el significado espiritual del Sabbath lo
convirtieron en una carga, eliminando la alegría que la gente debería tener en
el día santo de Dios y añadiendo cosas que Dios nunca había ordenado. Jesús
dijo que el Sabbath fue hecho para el hombre, no el hombre para el Sabbath
(Marcos 2:27). Es un día en el que debemos deleitarnos junto con aquellos que
también han sido llamados.
Las
cosas que son santas para Dios deben ser tratadas con dignidad y respeto.
Esto
implica ciertamente que nuestra apariencia externa es importante cuando nos
presentamos ante Dios en su día santo. El Nuevo Testamento pone como ejemplo de
comportamiento incorrecto al que acude a una fiesta sin la ropa apropiada.
(Mateo 22:11-12).
Cuando
entendemos y practicamos correctamente la observancia del Sabbath,
experimentamos la alegría que Dios dispuso. Es realmente un maravilloso día
santo semanal y debe celebrarse con un espíritu positivo, mirando a aquel que
lo creó para que nosotros lo disfrutemos.
Hablando a
través del profeta Isaías, Dios dice: " Si apartas tu pie por respeto al
Sabbath, para no hacer tu capricho en mi día santo; si al Sabbath llamas
delicia, consagrado al SEÑOR y glorioso; y si lo honras, no haciendo según tus
propios caminos ni buscando tu propia conveniencia ni hablando tus propias
palabras, 14 entonces te deleitarás en el SEÑOR. Yo
te haré cabalgar sobre las alturas de la tierra...".
(Isaías 58:13-14).
Usted
encontrará aún mayor alegría si comparte este tiempo santo con los hermanos de
mente y fe similares. Como leemos en el libro de los Salmos: " ¡Mirad cuán
bueno y cuán agradable es que los hermanos
habiten juntos en armonía! (Salmo 133:1).
ASPECTOS
ESENCIALES DE ESTE MÓDULO
·
El Sabbath semanal fue creado para toda la humanidad y ha
sido apartado, santificado, como tiempo santo.
·
El Sabbath, como día santo, requiere una asamblea
sagrada.
·
Celebrar significa reunirse, congregarse: en el Sabbath
nos reunimos como pueblo de Dios ante Él y nos regocijamos.
·
Celebrar una causa común une a las personas, les da una
identidad especial.
·
Los días de fiesta siempre tienen que ver con
celebración, comunidad y regocijo-celebrando juntos una ocasión especial.
ESTUDIO
AMPLIADO
·
El Reino de Dios
·
¿Tienen significado los Días Santos de Dios?
·
¿Siguen siendo válidos los Días Santos de Dios?
·
Los Días Santos de Dios: Ayer, hoy y mañana
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